El fichaje de Kostas Papanikolaou por el FC Barcelona ha pasado de ser una quimera a una posibilidad firme. El alero del Olympiacos podría convertirse en breve en nuevo jugador azulgrana si prospera la tentadora oferta que ha realizado el cub catalán para su traspaso, una opción que podrían ver con buenos ojos tanto el jugador como su actual club, Olympìacos.
Papanikolau, que era la primera opción en la lista de jugadores pretendidos para ocupar la posición de 'tres' en el nuevo Barça, tiene un año de contrato con vigor con el equipo de El Pireo, con el que se ha proclamado campeón de Euroliga las últimas dos temporadas. Su continuidad, sin embargo, se ha puesto en cuestión en los últimos días por su posible interés en marcharse a la NBA, donde sus derechos están en posesión de los Houston Rockets. Esta posibilidad, que parece no prosperar, supondría para su club un ingreso no superior a los 500.000 euros, cantidad máxima estipulada para el pago de traspasos en la liga americana, o ningún ingreso si el jugador prefiere esperar al próximo verano, cuando quedaría libre.
La llegada de la oferta del Barcelona, que algunos cifran en unos tres millones de euros por tres años para el jugador y 1,5 para el club de El Pireo, ha hecho cambiar la perspectiva tanto de Papanikolau como del Olympiacos. Fuentes griegas se hacían eco en las pasadas horas de las negociaciones entre ambos para prolongar la vinculación más allá de esta temporada. Ante la propuesta del club de firmar por tres años más, el agente del jugador hizo llegar a Olympiacos una contrapropuesta de cinco millones de euros netos por esas tres campañas, una cifra muy alejada de las posibilidades del club.
En vista de que el margen de negociación se reduce al máximo, la salida más honrosa para el alero griego y para el club de El Pireo en estas últimas horas pasaba por aceptar la propuesta de traspaso del Barcelona, que parece contemplar cláusulas de salida a la NBA que se reducirían a cero tras el segundo año de compromiso.
Papanikolaou, de 22 años y 2,03, fue elegido jugador con mayor proyección de la Euroliga esta pasada temporada, en la que promedió 9,2 puntos y 4,1 rebotes por encuentro en la Euroliga con casi un 70% de acierto en lanzamientos de dos puntos y un 40% en triples. Su progresión en los últimos dos años ha sido asombrosa, consolidándose como una pieza fundamental en los esquemas del bicampeón europeo
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